Llega una nueva edición de la Semana de Terror de San Sebastián. Hagamos un pequeño repaso de los títulos más interesantes.

Bienvenidos al fin del mundo

La inauguración de la semana viene fuerte con la nueva película del combo Simon Pegg - Edgar Wright (los de Zombie's Party). Nos traen otra comedia apocalíptica, que promete ser muy divertida. El mejor lugar para refugiarse será un bar detrás de una pinta.


Byzantium

La clausura se presenta lujosa con la última película del interesante director irlandés Neil Jordan. Trae una historia de vampiros de corte clásico que es, sin duda, uno de los títulos a tener en cuenta del fantástico de este año.


All Cheerleaders Die

Codirigida por Lucky McKee, a quien ya conocemos en la semana por películas como The Woman. Comedia negra universitaria que llevará una buena carga de profundidad y mucha mala leche.


Au nom du fils

Mi apuesta personal para esta edición. Su director, Vincent Lannoo ya ha participado dos veces en la Semana, la última vez con un falso documental de vampiros belgas original, ingenioso y muy divertido. Este nuevo trabajo además viene avalado con el reciente premio Meliés. No os la perdáis.


Cheatin'

Cine de animación de uno de los directores más prestigiosos del género, al menos en cuanto a una ambición más artística. Hablamos de Bill Plympton, un nombre que conocerán los afincionados. Cine negro en este caso, barnizado con su estilo tan personal y reconocible.


L'etrange couleur des larmes de ton corps

Película vanguardista que se ha hecho un recorrido por festivales que no son de género como Locarno y Toronto. Una apuesta con estética radical que se enmarca en el cada vez más homenajeado Giallo.

In Fear

Una película que se vio en Sundance. Una road movie con un uso muy particular del coche y la carretera. Ha tenido un recibimiento desigual, pero hay quien defiende el terror que consigue provocar.


Tai Chi Hero

El año pasado en la Semana vimos la primera parte, Tai Chi Zero. Artes marciales, steampunk, rótulos estrambóticos, magia y mucho humor. Si es tan divertida como la primera entrega, valdrá la pena.


We are What we are

Remake de la mexicana Somos lo que hay, por el director Jim Mickle, que trajo a la semana una película apocalíptica, Stake Land. Un american gothic, con el tono serio y elegante que demostró Mickle en su anterior película.