Crítica de la película La niñera mágica y el Big Bang por Obi-Wan

La niñera Mágica  fue la primera película sobre Nanny McPhee, que resultó una opción bastante decente para disfrutar de cine en familia. Así que Emma Thompson ha vuelto a la carga, adaptando de nuevo otro de los libros infantiles escritos por Christianna Brand sobre esta peculiar  niñera que se presenta en hogares que necesitan de su ayuda.

 Esta nueva entrega, parece que vaya a ser más fantástica, explotando mucho más la magia y las travesuras de los más pequeños, en  seguro detrimento del romanticismo y sutileza que gozaba la primera. Esta vez la historia se desarrolla en una granja, lo que dará pie a variadas y divertidas escenas en compañía de animales, lo que me hace imaginar una alocada mezcla de Mary Poppins y Babe, el cerdito valiente.

 Emma Thompson vuelve a encarnar la verrugosa y contrahecha señorita McPhee, acompañada por Maggie Gyllenhaal nominada al Oscar por su interpretación en Crazy Heart, la incombustible Maggie Smith (Harry Potter y el misterio del principe) y Raplh Fiennes (The reader).

 Cine infantil con cierta calidad, enseñanzas morales y entretenimiento asegurado. Para ver con los más pequeños y no morir en el intento.