Llega la que para mí es una de las sensaciones de la temporada por lo que a cine español se refiere. Hablo de La mosquitera de Agustí Vila. ¿Saben en cuántos cines de Madrid se proyecta? Exactamente en dos cines.
Habrá quien diga que lo que para mí es sensación no lo tiene por qué ser para los demás, Estoy de acuerdo. Sobre todo tras ver la cantidad de cines en la que proyectan otras películas españolas como Agnosia, Los ojos de Julia, Amador o Héroes.
El caso es que estamos ante una película que funcionará como la ráfaga de viento fresco que se adentra sin permiso en la habitación repleta de aire viciado en una tarde noche de invierno. De improviso, sin pedir permiso, La mosquitera, producida por Luis Miñarro, coproductor de la última ganadora en Cannes, se ha hecho con el premio gordo de Karlovy Vary, uno de los festivales más prestigiosos del circuito B y de la Seminci valiisoletana se trae aplausos, silbidos, una Espiga de Plata y un premio a la mejor actriz para Emma Suárez. No está nada mal.
Además de lo anterior añadamos a Geraldine Chaplin y a Eduard Fernández, quizá el mejor actor español de su generación, capaz de bordarlo con El método, con Obaba o con Tres días con la familia.
¿El problema? Que tantas expectativas acaben lastrando una película de esas que no apetecen a cualquier hora, como un cóctel ácido.
Hacedme caso.